Los 39 docentes que aspiran a hacer parte de la segunda cohorte de beneficiados del Programa “Atlántico bilingüe” que viajarán a Arizona, Estados Unidos, podrán lograrlo en caso que reúnan todos los requisitos. Así lo dio a conocer el secretario de Educación del Atlántico, Carlos Prasca Muñoz luego de hablar con los docentes que se presentaron a la Contraloría Departamental, ubicada en el piso ocho de la gobernación del Atlántico, para someterse a las evaluaciones lingüísticas y que está ubicados en niveles B1, B2 ó B+ que supone un dominio intermedio del idioma.
En esta reunión se dieron a conocer los requisitos y el cronograma que deben cumplir los aspirantes del programa. Llenaron el formulario de inscripción y trajeron los documentos necesarios para iniciar el trámite correspondiente.
El Plan de Formación Docente y Directivos Docentes y el Programa “Atlántico Bilingüe” plantea retos y acciones que apuntan a la cualificación de los docentes del área de inglés y está dirigido a todos los docentes de esta área que estén nombrados en propiedad en los establecimientos educativos oficiales del Departamento, con asignaciones académicas mínimo del 70 % en este idioma y cuyo retiro forzoso no esté calendado en los próximos siete años, que hayan sido evaluados por la Secretaría de Educación Departamental y/o Ministerio de Educación Nacional, en los años 2012, 2013 y hayan alcanzado niveles B1, B2 o B+.
La primera cohorte viajó el pasado 18 de marzo, de los cuales 20 provenían de los municipios no certificados y el resto de Soledad y Malambo. En total, viajaron 27.
El costo total del programa fue de $1.300 millones provenientes de recursos propios que representan el 5% de lo recaudado por la ordenanza que autoriza invertir en formación para docentes bilingües.
Para los profesores que no alcanzaron el nivel A1 y A2, se implementó una propuesta denominada “En cascada”, respaldada por el Ministerio de Educación Nación, a través de la cual, se les brinda capacitación en el British Council durante 10 meses para que lleguen al nivel B1 y B2 y sean, posteriormente, participes del programa de inmersión en el exterior.
Los beneficiados del programa de inmersión firman el compromiso de culminar, exitosamente, el programa de inmersión en el tiempo estipulado y deben presentar, seis meses después de haber terminado estos estudios, un examen de proficiencia para subir, mínimo, un nivel en la escala del Marco Común Europeo para la enseñanza y evaluación de lenguas.
“Esta es una tarea continúa que no termina”, puntualizó el secretario de Educación del Atlántico.
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